He leído con atención el primer texto que escribiera Rubén sobre la situación en Venezuela, y el segundo con que le responde a Nicolás sus comentarios. Si con el primer texto quiso insinuar no estar tomando partido(a lo cual tiene todo el derecho, si lo hiciera) con el segundo texto no hace más que mostrarse entero y presentarse como lo que hace mucho es: un hombre de centro derecha, a quien el espejismo del “pensamiento renovador” que hoy abrazan muchos ex izquierdistas, también ha seducido; pero de esa partecita que se ocupe Luis Brito García.
No voy a hablar aquí de cómo Rubén hace gala de una gran mezquindad al no reconocerle a la Revolución Bolivariana sus logros y conquistas a favor de los Pablos Pueblos venezolanos. Tampoco me referiré a la gentileza con que trata a esa oposición en la que solo ve “deseos de mayor participación democrática”. No me detendré en su muy mal logrado intento de querer quitar los colmillos al tiburón haciendo uso de una cita de Lenin, a toda luz fuera de contexto. Que cono insinúa Rubén, que el hecho de que haya una dependencia económica mutua entre Venezuela y los Estados Unidos, le quita a este su condición de imperio opresor y terrorista?
Pero bien, yo solo quería decir que a Rubén, como a su antiguo socio, se le olvido lo siguiente:
PRIMERO: Que el Tiburón aún está en nuestras orillas, tiene los mismos colmillos; y hace poco mordió a los pueblos de Honduras y Paraguay y su agresividad no depende de que él nos lo cante o no.
SEGUNDO: Se le olvido que en Venezuela gobierna Pablo Pueblo. Es cierto que el pobre Pablo Pueblo no ha sabido hacerlo todo bien y que muchas cosas se han debido hacer mejor; pero dígame usted cómo diablo ha podido hacer las cosas mejor cuando la familia de Ligia Elena no para de joder y de boicotear.
TERCERO: Se le olvidó al panita Rubén, que aunque traigan millones de sicarios, en Venezuela se está sembrando día a día para llenar los caminos de verde; para que no haya niños de colores extraños; para que no hayan rostros plásticos y se reduzcan los privilegios, como pregonaba el Padre Antonio.
Y CUARTO: Se le olvido a Rubén, que aunque el Tiburón venga como un huracán, seguiremos buscando Nuestra América para construir la Patria Grande; y aunque él ya no lo cante, sabemos que en estas tierras está PROHIBIDO OLVIDAR, tan tan; PROHIBIDO OLVIDAR, tan tan,; PROHIBIDO OLVIDAR, tan tan…
livingtao29@yahoo.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario