miércoles, 15 de abril de 2015

La arrechera fascista se desató el 15A

slide_292201_2342069_free
Hoy se cumplen dos años de “la arrechera” de la derecha fascista venezolana que entre el 15 y el 19 de abril de 2013 demostró ser letal y antidemocrática.
Luego del anuncio oficial emitido por el Consejo Nacional Electoral que dio como legítimo ganador de la Presidencia de la República a Nicolás Maduro Moros, la reacción de rechazo como síntoma de malos perdedores en el juego democrático, por parte de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), se dio a conocer como una orden desenfrenada, desmedida y criminal.
La novel historia la resume en el famoso “descarguen su arrechera”, lanzado en la madrugada del 15 de abril por el derrotado candidato Henrique Capriles Radonski, con el lamentable saldo de 11 muertos, 289 detenidos, 78 lesionados, además de las instituciones del Estado que a consecuencia del desbordado vandalismo tuvieron que bajar sus respectivas santamarías.
Mientras organismos internacionales, en calidad de observadores, avalaban la voluntad del pueblo traducida en 7 millones 505 mil 338 votos a favor del candidato chavista Nicolás Maduro, voceros de la derecha se confabulaban para llamar a la desobediencia, al desprestigio del árbitro y a la ira que descargarían en sus ollas, y luego en las calles, en forma de violencia delincuencial.
El para ese entonces recién electo presidente obrero Nicolás Maduro, denunció el desconocimiento del resultado electoral de ese 14 de abril de 2013, al indicar que sus autores buscaban provocar un golpe de Estado en el país.
“Mayoría es mayoría y debe respetarse en democracia (…) eso solo tiene un nombre: golpismo”, expresó en cadena nacional.
Con él coincidió el jefe del Comando de Campaña Hugo Chávez, Jorge Rodríguez, quien hizo saber que la ultraderecha buscaba reeditar el abril de 2002.
Dijo el 15 de abril de 2013 que “la intención del comando del odio está al descubierto. Mientras ellos quieren enfrentar hermanos contra hermanos, nosotros esgrimimos la paz y la verdad”.
Por su parte, el jefe del Comando Estratégico Operacional (CEO), mayor general Wilmer Barrientos, manifestó que la Fuerza Armada siempre está atenta a generar y armar escenarios de paz.
DESCONOCER AL PUEBLO Y SU VOLUNTAD
No obstante todas estas muestras de talante democrático, de paz y de búsqueda de entendimiento, la oposición derrotada mostró que acababa de recibir una herida que la haría más peligrosa, al punto de no medir las consecuencias de sus acciones e instrucciones para con sus desconcertados seguidores.
La frustración de no haber logrado el poder por la vía electoral, como lo demanda la Constitución de Venezuela, generó desesperación que emergió a la luz pública en varias declaraciones que precedieron y que siguieron al “descarguen sus arrechera”.
El representante de la MUD, Ramón Guillermo Aveledo, aseguró: “no vamos a aceptar que nos quiten ni uno solo de nuestros votos”.
El candidato Capriles, doble perdedor en contiendas electorales, expresó que “el derrotado es usted y su gobierno, señor Maduro, si antes era ilegítimo ahora goza de más ilegitimidad”.
Insistió en que “no reconocemos los resultados que acaba de emitir el Consejo Nacional Electoral, hasta que se haga una revisión exhaustiva de todos los votos, ante el pueblo y ante el mundo”.
Actitud que se topó con una piedra que la propia derecha había fortalecido, ya que el fundador del Centro Carter, el expresidente estadounidense Jimmy Carter, dijo: “de las 92 elecciones que hemos monitoreado, yo diría que el proceso electoral en Venezuela es el mejor en el mundo. Tienen un sistema de votación maravilloso”. Expresión emitida por su experiencia como organismo observador en varias elecciones nacionales.
ATAQUE POR MEDIOS Y REDES
La actitud antidemocrática de la derecha estuvo acompañada por una campaña mediática, con fuerza en las redes sociales, donde desfilaron mentiras y manipulaciones que aupaban la violencia.
Quizás el ejemplo más emblemático, fue el mensaje en Twitter de Nelson Bocaranda: “Informan que en el CDI de La Paz en Gallo Verde, Maracaibo, hay urnas electorales escondidas, y los cubanos de allí no las dejan sacar”, que logró más de 6.500 retwitts. Eso causó los consabidos ataques y destrozos deliberados en instituciones de salud, donde corrió riesgo la vida de las personas que allí laboraban, incluyendo a los miembros de la misión cubana.
Así atacaron 35 instalaciones de Barrio Adentro, dos hospitales, hirieron aparte a 21 funcionarios, destrozaron nueve instituciones públicas, causaron desmanes en tres sedes del PSUV y en siete del CNE, además de 18 medios alternativos y 39 sedes de Mercal y Pdval y Casas de Alimentación, en todo el territorio nacional.
LO DE LA LIMONERA NO FUE AL AZAR
El certero ataque de la derecha al asentamiento La Limonera, barriada popular del municipio Baruta de Caracas, no fue al azar. Desde su fundación, es un centro de vida chavista, que se planteó constituirse en comuna, lo cual implica un sistema de organización bajo esquemas sociales de inclusión y amplia participación del Poder Popular en la toma de sus decisiones.
Además, su CDI compite en calidad y servicios con la oferta privada de alta tecnología en salud. Por ello había que atacar a La Limonera y a todos sus vestigios de organización y eficacia socialista. Fue un ataque programado que la derecha aún no reconoce, en ese territorio del este capitalino que ellos consideran parte exclusiva de su reducto opositor.
En todo este entramado de violencia generado por la derecha, la actuación del Estado se refleja en las capturas e imputaciones anunciadas por el Ministerio Público, de Mohamer Rodríguez Nassir y Erick Leonardo Mele Gómez (caso La Limonera); Joel Antonio Contreras y José Omar León (Táchira) y los hermanos José Carlos y Rodrigo Hernández (caso de Cumanacoa).
Aún se espera por el resto de los casos y que se imponga la ley.
001_mg_1462_1366243694
__________
Víctimas fatales de la impune ira derechista
Barrio La Musical, Maracaibo Rey David Chacín González (11 años), Johan Hernández (22 años) y María Victoria Báez (12 años) fueron arrollados por un camión mientras celebraban la victoria de Maduro. Además de ello hubo 13 heridos.
Sede del CNE en Maracaibo Luis Eduardo García Polanco (24 años), murió de un disparo en el pómulo mientras manifestaba con un grupo de jóvenes su rechazo al llamado de Capriles.
Cumanacoa, Sucre Hender Bastardo (21 años) motorizado militante del PSUV, asesinado de un impacto por arma de fuego mientras celebraba la victoria popular de la Revolución.
San Cristóbal, Táchira Henry Rangel (32 años) murió de un disparo en plena celebración del triunfo de Maduro.
La Limonera, Baruta José Luis Ponce Ordóñez (45 años) y Rosiris Reyes (44 años) fallecieron por impactos de bala mientras defendían su Centro de Diagnóstico Integral. Ese día también fue herido en la cabeza Jhonny Pacheco (37 años) quien tras agonizar por cuatro días falleció el 19 de abril.
San Cristóbal, Táchira Keler Guevara (23 años) oficial de la Policía Nacional Bolivariana asesinado de varios disparos.
San Cristóbal, Táchira Gerardo Rico (39 años) fue víctima de una brutal agresión el 15 de abril. Tras casi 23 días de agonía falleció.
LUIS MARTÍN/CIUDAD CCS

No hay comentarios:

Publicar un comentario