México, 29 nov (PL) El debate de la reforma político-electoral de México, previsto para hoy en el Senado de la República, quedó pospuesto nuevamente hasta el lunes próximo, lo que estrecha aún más el margen para aprobar la reforma energética.
Los legisladores del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) y del Partido Acción Nacional (PAN) decidieron postergar el debate con el propósito de llegar a consensos durante el fin de semana sobre algunos asuntos comprendidos en la medida.
Según informó el secretario de la Comisión de Gobernación de la Cámara alta, Héctor Larios, será el lunes a las 11:00 hora local, cuando comiencen las discusiones, con el objetivo de conocer a fondo el dictamen y plantear posibles cambios.
El parlamentario panista afirmó que ese día las comisiones sesionarán aunque no asistan los legisladores del Partido de la Revolución Democrática (PRD), que ayer abandonaron el debate al denunciar que no fueron tomadas en cuenta muchas de sus reservas.
La formación de izquierda se levantó de la mesa de negociación en protesta por algunos puntos de la reforma política y, además, denunció la existencia de un acuerdo entre el PAN y el PRI para sacar adelante la reforma energética.
Al mismo tiempo, Jesús Zambrano, presidente nacional del PRD, anunció la retirada de su partido del Pacto por México hasta que no se corrijan las claras anomalías y atropellos en el Legislativo.
De acuerdo con Zambrano, varios de los puntos que se pretenden incluir en la iniciativa no forman parte de los compromisos del Pacto, mientras que temas como la reforma política del Distrito Federal y las leyes reglamentarias de 2012 no fueron incluidos.
La propuesta político-electoral debe ser aprobada antes de pasar a la discusión de la energética, según una condición establecida por el PAN.
Pero la nueva fecha reduce el margen de tiempo para legislar la reforma con la que el presidente Enrique Peña Nieto quiere permitir la inversión privada en el sector de los hidrocarburos, y a la cual se opone la izquierda por considerar que arriesga los recursos del país.
Los puntos fundamentales de la reforma política pospuesta hasta el lunes incluyen la reelección consecutiva de legisladores y el otorgamiento de autonomía constitucional a la Procuraduría General de la República, que actualmente depende del Gobierno federal.
También establece, entre otros temas, que el Instituto Federal Electoral se convertirá en Instituto Nacional Electoral, el cual tendrá 11 consejeros, que seguirían siendo elegidos por la Cámara de Diputados.
jf/mar
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