Miles de taxistas protestaban este lunes en Bogotá contra el servicio de transporte privado Uber, con un saldo hasta el momento de 16 detenidos, cuatro policías con lesiones leves y graves embotellamientos en las principales arterias de la capital.
Con consignas como "Fuera Uber", "Contra la piratería" y "M14", en alusión a la fecha de este lunes, los conductores de los tradicionales vehículos amarillos enlentecían la circulación con el denominado "Plan Tortuga", una marcha de entre 15 y 20 kilómetros por hora que bloqueaba el usualmente congestionado tránsito de Bogotá.
La movilización dejaba 16 detenidos, cuatro policías con lesiones leves, nueve vehículos inmovilizados y 189 multas aplicadas, según el último balance de las autoridades, que no reportaron otros damnificados pese a los choques registrados entre la policía antidisturbios ESMAD y los manifestantes.
"Es una caravana pacífica", había dicho más temprano el vocero de los taxistas manifestantes, Freddy Contreras. "Esta (protesta) no hubiera pasado si el gobierno no fuera tan permisivo y si hubiera sacado a Uber", añadió en declaraciones a Blu Radio.
Creada en 2009, con sede en Estados Unidos y operaciones en 59 países, Uber cuenta con una aplicación telefónica para que automovilistas particulares ofrezcan servicios de transporte, lo que ha sido denunciado como "competencia desleal" por taxistas tradicionales.
"Estamos protestando por la piratería y la ilegalidad de Uber y todas las plataformas tecnológicas que tienen unos vehículos que no son aptos para el servicio público", sostuvo Juan Carlos Socha, un taxista de 40 años consultado por la AFP.
"Nos hemos unido a nivel nacional para decirle al gobierno que estamos descontentos porque son muy permisivos con las aplicaciones. Uber no debe estar operando", apuntó Daniel Gil, un taxista de 46 años llegado especialmente de la ciudad de Santa Marta, 960 kilómetros al norte de Bogotá.
Según los taxistas, Uber cobra las carreras más baratas porque sus choferes no tienen que pagar un costoso "cupo" para prestar sus servicios, ni someterse a otras regulaciones oficiales.
Usuarios de taxis denunciaron presiones de manifestantes para que se bajaran de los taxis que sí estaban prestando servicio.
"Venía en la cola, nos cerraron, nos bajaron, nos obligaron a bajar, que si no nos bajábamos al señor le pinchaban el carro, que teníamos que bajarnos, prácticamente nos sacaron del carro", contó a la AFP Blanca Galeano, una señora que iba a una cita médica con una persona mayor.
La semana pasada la Superintendencia de Puertos y Transporte, la entidad que controla el servicio público de transporte en Colombia, multó a Uber con 450 millones de pesos (unos 142.000 dólares) al ser considerado un "servicio no autorizado".
Colombia, uno de los mayores mercados de Uber en América Latina, registró las primeras protestas contra ese servicio en julio pasado en Bogotá, Medellín (noreste), Cali(oeste) y Cartagena (norte).
No hay comentarios:
Publicar un comentario