viernes, 20 de junio de 2014

Corpus Christi: la lucha entre el bien y el mal arraigada en la tradición ancestral venezolana

Caracas, 19 Jun. AVN.- Nueve jueves después del jueves Santo, en varios estados del país se celebra el día de Corpus Christi, una fiesta que desde el siglo XVIII rinde tributo al Santísimo Sacramento a través de la danza alegre y colorida que ejecutan por tradición promeseros vestidos de rojo y con grotescas máscaras, que simbolizan demonios rendidos ante la voluntad del bien y la bendición del Santísimo.
En Venezuela existen 11 cofradías de diablos danzantes, declaradas en 2012 por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco, por sus siglas en inglés) como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Esta manifestación religiosa se mantiene vigente desde 1749 hasta la fecha, comentó Ernesto José Herrera, vicepresidente de los Diablos Danzantes del Corpus Christi de Venezuela, en entrevista con AVN.
En San Francisco de Yare, estado Miranda, la actividad se inició el miércoles 18 a partir de las 11:45 de la mañana, cuando los capataces y arreadores junto a los promeseros, danzando la bamba, se dirigieron hacia las puertas de la iglesia de San Francisco de Yare, donde esperaron hasta las doce del mediodía la bendición y autorización del sacerdote para iniciar la danza.
Los Diablos danzan por las calles del pueblo al son del repique de la caja (tambor típico del ritual), con la máscaras hacia abajo, ya que no pueden subir la cara ni mirar a Jesucristo mientras bailan, hasta caer de rodillas rendidos, sumisos y orando frente a la iglesia, en señal de respeto hasta que el sacerdote del pueblo los bendice.
Los 2.002 promeseros recorrieron el casco central de San Francisco de Yare, y luego los Diablos Danzantes bailan ante 41 altares en todo el pueblo, mientras los fieles se concentraron frente a la cruz verde, ubicada en el sector El Empedrado, desde donde partió nuevamente la procesión con una medalla sagrada que, aunque no representa al Santísimo Sacramento, cumple un rol fundamental en la ceremonia.
Este jueves los promeseros se reunieron a las siete de la mañana en la Casa de los Diablos Danzantes y allí los capataces se dirigieron al cementerio para rendir tributo a los promeseros desaparecidos. Luego, recorrieron 45 altares y partirán hacia la Plaza Bolívar de Yare, donde darán dos vueltas antes de entrar a la iglesia a escuchar la misa oficiada por el Arzobispo de Los Teques, Freddy Fuenmayor.
Al concluir la misa se juramentaron los nuevos promeseros y a partir de la una de la tarde, se inició una procesión con la imagen de Jesús vivo, en la que los Diablos Danzantes con sus máscaras bailaron y rindieron honor al Santísimo antes de devolverlo a la iglesia. Culminaron su recorrido en el sector El Empedrado.
"No hay cansancio ni obstáculos para rendirle honores al Santísimo cuerpo de cristo", afirma Herrera, quien detalla que la celebración se extiende hasta el domingo 21.
Diablos de Aragua 
Los Diablos Danzantes de Cata, Cuyagua, Ocumare de la Costa, Chuao y Turiamo, en las costas de Aragua, rindieron tributo este jueves al Corpus Christi desde las cinco de la mañana con un recorrido que comenzó en Chuao.
Este año participaron unos 200 diablos que visitaron las casas de los hermanos del Corpus Christi, estuvieron en la procesión y danzaron frente a la iglesia, en el patio de secado del cacao, como culto al Santísimo Sacramento.
Jhonatan Liendo, miembro de la cofradía, indicó que este año se estrenan 10 nuevos diablos, unos por devoción y otros en cumplimiento de promesas.
"Todos los danzantes son oriundos de Chuao, porque en este pueblo solo danzan los lugareños o descendientes. Todo aquel que sea de Chuao puede bailar diablo, a partir de los nueve años de edad, luego de cumplir con la primera comunión", resaltó.
Estas festividades comenzaron el miércoles 18, en horas de la mañana, con el repique de campanas frente a la iglesia de Chuao, dirigido por el capataz de los diablos y la Sayona (un hombre vestido de mujer), que representa la mamá de los nuevos diablitos, que danzan amarrados.
En la celebración, los danzantes visitan las casas de los capitanes de la cofradía, tanto las de los que están vivos como las de quienes ya han fallecido, como un homenaje a quienes han dedicado buena parte de su vida a mantener viva esta cultura religiosa.
Cojedes y Vargas dicen presente
Este jueves los Diablos Danzantes de San Carlos, Cojedes, celebraron el día de Corpus Christi con un recorrido por la llamada trocha que va desde en el barrio Las Lajitas, lugar donde está ubicada la casa de los Diablos Danzantes, hasta el templo de San Juan Bautista ubicado en la capital cojedeña.
José Luis Bravo, diablo mayor de la cofradía, comentó que el domingo 22 de junio, a las cinco de la tarde, desde la Iglesia Santo Domingo saldrá la procesión del Santísimo Sacramento donde los Diablos irán caminando de espaldas, como muestra de rendición ante el bien. El recorrido concluye en la Iglesia Catedral y el cierre será en la Iglesia San Juan.
Mientras que en el estado Vargas, más de 1.800 diablos se rindieron ante el Santísimo Sacramento en la puertas de la iglesia San Francisco de Asís, en Naiguatá. Los diablos llegaron a la iglesia tras bajar desde el Cerro Colorados hasta la Plaza Bolívar.
Este año fueron bautizados cerca de 80 nuevos diablos que debutaron este jueves en la visita a diez altares, distribuidos en todo el pueblo de Naiguatá.
 AVN 

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