YVKE Mundial/ Luis Angel Yáñez. Si algunas causas pueden ser atribuida al repunte de la inflación en Venezuela son la especulación y el acaparamiento que forman parte de una guerra económica contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro así lo señalan varios especialistas quienes advierten que en coyunturas electorales estos síntomas se hacen más evidentes.
El politólogo Iván Sicard señala al respecto “mientras los medios de comunicación privados nos bombardean diariamente advirtiéndonos de la inflación y la escasez, culpando al Gobierno y alegando una supuesta “destrucción del país” por parte del Presidente Maduro y sus funcionarios, para convencernos de su ineficiencia. Los comerciantes y los Industriales se llenan los bolsillos acaparando y especulando. De esta manera el venezolano común, cuando encuentra un rubro “Escaso”, comprará más de lo necesario y así contribuye con el acaparamiento y la escasez”.
En el caso puntual venezolano la especulación y el acaparamiento aunado a una maquinaria propagandística mediática privada contribuyen a invisivilizar todos los proyectos que ejecuta el Gobierno Nacional para aliviar la diaria carga del venezolano común, en cuanto al acceso a los productos de primera necesidad.
En otras palabras, mientras el Gobierno Nacional establece operativos masivos de venta de productos, MERCAL, PDVAL, BICENTENARIO, y hasta subsidios para algunos rubros, para tratar de llevar a la mesa del venezolano común los productos de primera necesidad, la especulación, el acaparamiento, la escasez, y la inflación están llenando el bolsillo de los infractores.
Dario Morandy asegura que lo que identificamos como guerra económica es parte de un plan para crear una crisis de gobernabilidad. Es una estrategia perversa que busca impedir el control político sobre el cambio social y al mismo tiempo romper la coherencia interna de los procesos dirigidos a la transformación estructural de la sociedad venezolana.
Morandy asegura que la guerra económica hoy se expresa en especulación, desabastecimiento de productos básicos por el acaparamiento y la parálisis premeditada de la producción nacional. Los grupos económicos paralizan y controlan la producción a su antojo e imponen un mercado financiero paralelo donde se cotiza el dólar al precio que ellos deciden. Ningún país puede resistir un ataque tan desproporcionado contra su economía, la impunidad tampoco garantiza la resistencia necesaria.
El persistente desabastecimiento, la desmesurada especulación con productos de la cesta básica, el acaparamiento, la premeditada paralización de la producción, la especulación financiera con el dólar paralelo solo sirven para nutrir una inflación que devora el poder adquisitivo generando desconfianza y desesperación en la población.
Soluciones políticas y económicas
Si consideramos como variables determinantes: la producción nacional, la importación solidaria y complementaria, la comercialización, el transporte y el abastecimiento, advierte Morandy debemos prepararnos para una batalla que requiere políticas innovadoras y al mismo tiempo deberá enfrentar la impunidad, la corrupción y la ineficiencia de una burocracia que luce desvinculada de los grandes problemas del país.
Ante este panorama recomienda Julián Rivas debemos Planificar Tácticas y estrategias eficientes para impedir que algunos sinvergüenzas sigan destrozando todas las acciones que el Gobierno ejecuta a los fines de aliviar la diaria carga del venezolano común.
Entre las posibles soluciones para esta coyuntura donde prevalece un golpe económico en contra de la población el analista político Julián Rivas considera que la producción nacional requiere mayor contraloría del pueblo organizado y del Ejecutivo para constatar que los financiamientos que otorga la banca pública y el Gobierno Bolivariano a productores y productoras para impulsar la economía del país, sean destinados la actividad productiva para los que se solicitaron y se aprobaron.
La contraloría por parte del pueblo organizado y como del Estado, está inscrita en el espíritu del Órgano Superior para la Defensa Popular de la Economía, institución que recientemente creó el presidente constitucional Nicolás Maduro para enfrentar los actos de sabotaje del sector privado, señaló.
Denunció que muchos negocios compran la mercancía, la guardan y cuando hay un alza de precios, sacan el producto a la venta, mucho más costoso, comparado al precio inicial con el que fue adquirido. Usando así “la inflación una excusa para robar al pueblo”, analizó.
Analizó que para estabilizar la economía del país y hacer frente a las acciones de acaparamiento y especulación del sector privado es necesario rediseñar el sistema de producción en todas las áreas para generar, nuevas empresas y nuevos modelos de producción, que se comprometan a surtir al pueblo venezolano de los bienes y servicios que requiere en todo momento.
Con información de Rebelión y Aporrea
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