viernes, 20 de septiembre de 2013

Presidente Mujica hizo un sentido llamado a combatir la cultura consumista

“Nadie plantea que la gente no tiene que consumir o gastar”, exclamó el presidente Mujica durante su programa radial
“El problema es cuando sin darnos cuenta terminamos no viviendo la vida, sino esclavizándola y entramos a perder de vista que existen un conjunto de bienes muy viejos que no cuentan, pero que son fundamentales, como ser el valor del amor y la amistad” afirmó el presidente.
“Los seres humanos somos gregarios, no podemos vivir aislados, no podemos compaginar la soledad interior en el medio de la multitud. No es posible vivir con felicidad sin cultivar las relaciones humanas. Y todo eso requiere tiempo para vivir. Y la vida se nos escapa en esa escalera interminable de cultivar medios económicos, pagar cuentas, contraer compras y tratar de inventar cosas para tener más y más plata para gastar” dijo Mujica en su audición radial del Sodre.
El presidente insistió en las patologías de la cultura consumista y habló de que hay cosas que son “moralmente delictivas”. “Agencias de viajes esperan a (menores) y las compañeras de su barra en la puerta del colegio. Le entregan una serie de pegotines, símbolos, pulseritas. Y le hacen la pregunta: ‘¿dónde vas a festejar tus 15 años? ¿En Miami o en Europa?’” relató Mujica.
“¿Qué pasa en el alma de una gurisa que empieza a hacerse ilusiones por algo y que ve que tiene amigas que van a concretar esa aventura de alguna forma, y ella, por la naturaleza y las dificultades de su hogar, no puede?” preguntó el presidente.
“El botija de un barrio pobre y un día (…) aparece con unos championes de esos de altísima categoría. No es que no tenga derecho, es que en el fondo tiene otras necesidades mucho más urgentes. Pero la cabecita de ese gurí está condicionada por el efecto demorativo de toda nuestra sociedad que empuja a más y más” se lamentó el mandatario.
Además, Mujica habló del juego en general y la ludopatía en particular.
“Los hombres han cultivado esta afición a evadirse y no debe de tomarse eso en el estricto sentido económico. El jugar a algo está en nosotros inmanentemente desde niños. Lo cierto es que la especie humana siempre ha jugado a alguna cosa. No hay que entender esto al pie de la letra en el sentido de que la afición al juego es sólo por economía” afirmó.
Mujica concluyó diciendo que “no hay otra arma efectiva que el cultivo de nuestra cabeza para generar la libertad de saber elegir lo que nos conviene y lo que no”.
Espectador.com

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