Caracas, 24 Ago. AVN.- Representantes de
supermercados privados del país han manifestado estar de acuerdo con la
implementación del sistema captahuella para la seguridad alimentaria,
como mecanismo para evitar el contrabando y la especulación en la venta
de productos básicos.
Durante la aplicación del Plan Eficiencia Mata Cola, por parte de la Superintendencia de Precios Justos, los encargados y representantes de las comercializadoras de alimentación también han expresado su disposición para cooperar en la instalación del sistema en todo el país, y así contrarrestar las colas para la adquisición de productos básicos.
Tal fue el caso de la gerente de Practimercados Día a Día, ubicado en Caracas, Edith Mijares, quien indicó que ve en la instalación de captahuellas "la solución a los inconvenientes que tenemos con personas que ingresan a la tienda una y otra vez para adquirir el producto y luego revenderlo".
"Tenemos denuncias de personas que ven a otras comprando y luego las ven afuera revendiendo el producto. Es una situación que tenemos que evitar y el sistema biométrico es una opción", apuntó durante un contacto informativo transmitido por Venezolana de Televisión.
Uno de los propietarios de Supermercados De Cándido, en Zulia, donde funciona el sistema biométrico, subrayó los resultados que se han registrado en la disminución del contrabando interno, tomando en cuenta que la entidad zuliana es una de las más afectadas por el "bachaqueo" debido a su cercanía con Colombia.
El propietario participó este sábado con el superintendente de Precios Justos, Andrés Eloy Méndez, en una demostración del sistema captahuella.
Señaló que mediante este sistema pueden mantener el orden y evitar la salida de alimentos para el contrabando.
"Estamos garantizando que los productos se encuentren disponibles porque no se quiere que el usuario siga pasando por el proceso de larga espera en una cola", señaló en una entrevista a Venezolana de Televisión.
Mencionó que anteriormente, producto del contrabando, los productos no duraban en los mostradores, "ya en dos horas no había nada, pero ahora pueden estar hasta seis o siete días en los anaqueles; la situación era tan fuerte que incluso cuando llegaban los alimentos los bachaqueadores buscaban quitarnos las pacas de comida de las manos", contó.
Los "bachaqueros", el nombre que le dan los zulianos a las personas que forman parte de la logística del contrabando, son quienes van a los supermercados, hacen compras diarias de los productos básicos y los ponen a disposición de la red de mafias.
La presencia de los bachaqueros ocasionó largas colas en los supermercados y situaciones de desorden alrededor de las cadenas de alimento.
Con el sistema captahuella, que se irá instalando progresivamente en todos los mercados públicos y privados, se busca proteger a las familias y disminuir el contrabando de extracción.
El superintendente explicó este domingo que en la red De Candido "se han reducido las colas en un 80% y superado la aglomeración de personas a la llegada de algunos productos sensibles".
Señaló que el organismo que dirige ha sostenido reuniones con el sector público y privado para trabajar sobre esta adecuación.
"Hemos estado hablando con el sector público y privado sobre el sistema biométrico. El sector privado ha estado muy de acuerdo. Están de acuerdo en adoptar el sistema para atender a las familias, llevar el plato de comida justo y conveniente a cada quien", informó.
Méndez subrayó que para el 30 de noviembre de este año, todos los mercados y supermercados deberán contar con el sistema captahuellas, que registra a los usuarios para evitar que una misma persona se lleve diariamente los productos para su reventa o contrabando.
Durante la aplicación del Plan Eficiencia Mata Cola, por parte de la Superintendencia de Precios Justos, los encargados y representantes de las comercializadoras de alimentación también han expresado su disposición para cooperar en la instalación del sistema en todo el país, y así contrarrestar las colas para la adquisición de productos básicos.
Tal fue el caso de la gerente de Practimercados Día a Día, ubicado en Caracas, Edith Mijares, quien indicó que ve en la instalación de captahuellas "la solución a los inconvenientes que tenemos con personas que ingresan a la tienda una y otra vez para adquirir el producto y luego revenderlo".
"Tenemos denuncias de personas que ven a otras comprando y luego las ven afuera revendiendo el producto. Es una situación que tenemos que evitar y el sistema biométrico es una opción", apuntó durante un contacto informativo transmitido por Venezolana de Televisión.
Uno de los propietarios de Supermercados De Cándido, en Zulia, donde funciona el sistema biométrico, subrayó los resultados que se han registrado en la disminución del contrabando interno, tomando en cuenta que la entidad zuliana es una de las más afectadas por el "bachaqueo" debido a su cercanía con Colombia.
El propietario participó este sábado con el superintendente de Precios Justos, Andrés Eloy Méndez, en una demostración del sistema captahuella.
Señaló que mediante este sistema pueden mantener el orden y evitar la salida de alimentos para el contrabando.
"Estamos garantizando que los productos se encuentren disponibles porque no se quiere que el usuario siga pasando por el proceso de larga espera en una cola", señaló en una entrevista a Venezolana de Televisión.
Mencionó que anteriormente, producto del contrabando, los productos no duraban en los mostradores, "ya en dos horas no había nada, pero ahora pueden estar hasta seis o siete días en los anaqueles; la situación era tan fuerte que incluso cuando llegaban los alimentos los bachaqueadores buscaban quitarnos las pacas de comida de las manos", contó.
Los "bachaqueros", el nombre que le dan los zulianos a las personas que forman parte de la logística del contrabando, son quienes van a los supermercados, hacen compras diarias de los productos básicos y los ponen a disposición de la red de mafias.
La presencia de los bachaqueros ocasionó largas colas en los supermercados y situaciones de desorden alrededor de las cadenas de alimento.
Con el sistema captahuella, que se irá instalando progresivamente en todos los mercados públicos y privados, se busca proteger a las familias y disminuir el contrabando de extracción.
El superintendente explicó este domingo que en la red De Candido "se han reducido las colas en un 80% y superado la aglomeración de personas a la llegada de algunos productos sensibles".
Señaló que el organismo que dirige ha sostenido reuniones con el sector público y privado para trabajar sobre esta adecuación.
"Hemos estado hablando con el sector público y privado sobre el sistema biométrico. El sector privado ha estado muy de acuerdo. Están de acuerdo en adoptar el sistema para atender a las familias, llevar el plato de comida justo y conveniente a cada quien", informó.
Méndez subrayó que para el 30 de noviembre de este año, todos los mercados y supermercados deberán contar con el sistema captahuellas, que registra a los usuarios para evitar que una misma persona se lleve diariamente los productos para su reventa o contrabando.
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