Este martes se confirmó un caso importado de Chikungunya en Venezuela, el afectado es un ciudadano del país y proveniente de República Dominicana, el cual luego de los exámenes de sangre pertinentes dio seropositivo, afirmando la existencia de la enfermedad.
Así lo anunció el Director General de Salud Ambiental, Jesús Toro, quien añadió que “el Gobierno Bolivariano logró detectar rápidamente esta enfermedad luego de un trabajo epidemiológico realizado al conocerse que el paciente tenía los síntomas frecuentes de fiebre muy alta y dolores muy fuertes debido a la inflamación de las articulaciones. El paciente ya está recibiendo el tratamiento correspondiente”.
Destacó Toro que Venezuela es el país número quince en la región en reportar la presencia del virus de Chikungunya, con un caso importado, y tomando en cuenta las condiciones climatológicas tropicales de nuestro país, y su conexión con el resto del mundo, desde el pasado mes de enero se han mantenido en alerta los sistemas de vigilancia epidemiológica para este virus.
“La detección temprana de este caso demuestra la actuación eficiente del Gobierno Bolivariano en la vigilancia epidemiológica de nuestro país”, opinó el Director de Salud Ambiental.
Además, Toro informó que en las Américas se conocen 60 mil posibles casos de Chikungunya, donde los más frecuentes son: Haití, República Dominicana, San Martín e Islas Holandesas.
El Instituto Nacional de Higiene “Rafael Rangel” (INHRR) está totalmente dotado con los reactivos necesarios para hacer el diagnóstico y tomar las medidas correspondientes de forma oportuna. “Se han tomado y se seguirán tomando las medidas y protocolos recomendados por la OMS y OPS, además de su abordaje clínico a nivel ambulatorio y hospitalario”, aseguró el especialista.
El virus Chikungunya pertenece, al igual que el dengue, al grupo de los Arbovirus, o virus transmitidos por artrópodos. Es transmitido principalmente por dos vectores: Aedes aegypti y Aedes albopictus.
De hecho, desde el 7 de abril, en el marco del Día Mundial de la Salud, el Ministerio del Poder Popular para la Salud ha impulsado la campaña “Al mosquito ni agua” para promover la eliminación de criaderos de mosquitos que contagian el dengue. Dicha estrategia es igualmente efectiva contra el virus del Chikungunya, “por ello la necesidad de continuar con las labores comunitarias de control del dengue”, explicó Toro.
Dichas labores incluyen, adicionalmente, el control vectorial con insecticidas para la eliminación del mosquito adulto. Al respecto, Toro detalló la metodología correspondiente: “Cuando se detecta un caso de dengue –o en este caso de Chikungunya- la vigilancia epidemiológica debe actuar con la rapidez del caso mientras se confirma. Al confirmarse se le notifica al epidemiólogo más cercano del ambulatorio u hospital y este, a su vez, le notifica a la unidad de control de vectores para que se envíe una cuadrilla de fumigación. De esta forma, se elimina la presencia del mosquito adulto en el lugar de ubicación del paciente y se fumigan, en las primeras 48 horas, todas las residencias o instalaciones que se encuentran hasta doscientos metros a la redonda. Esto es parte del sistema de vigilancia epidemiológica tanto para dengue como para Chikungunya. Esas cuadrillas de fumigación están identificadas, son funcionarios o funcionarias del Ministerio del Poder Popular para la Salud y ayudan a eliminar los criaderos, además de fumigar el interior de las casas y sus alrededores”.
Tomando en cuenta de que se trata del mismo vector que transmite el dengue, “se han instruido a los 24 estados del país para que trabajen sin descanso en la eliminación de criaderos en las comunidades con circulación de este virus”, indicó Toro.
Finalizó explicando que “como la fiebre del Chikungunya no tiene tratamiento específico, la medicación en estos casos se orienta a aliviar los dolores o molestias. Si el paciente tiene fiebre se recomienda abundante hidratación, refrescarlo con compresas de agua fría y la administración de acetaminofén”.
Andy Álvarez
(Prensa MPPS)
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